martes, 10 de septiembre de 2013

Homosexualidad y demonios

Hola: Parece que hemos venido de Medugorje con gasolina. No tengo intención de ser políticamente correcto.

En estos meses de silencio, me he preguntado muchas cosas acerca de cómo ha actuado en la historia de la humanidad el enemigo, respecto al tema de la homosexualidad.

En primer lugar es necesario desmentir por completo el que pueda ser voluntad de Dios el que existan personas homosexuales, ya que el Génesis es claro al afirmar que Dios creó hombres y mujeres y les dio el mandato de llenar la Tierra.
Cada ser engendrado (embriones incluidos, aunque se pierdan o se aborten) es un ser eterno, destinado a dar gloria a Dios, por los siglos de los siglos; y se originan por decisiones libres de seres humanos,  aunque estas sean contrarias a la voluntad de Dios (p. ej. violaciones).

Por tanto la manera peor de quitarle gloria a Dios es engañar al ser humano para que no engendre hijos, ni uno sólo, para que Dios no pueda actuar en esa vida, ni salvarla, ni nada.

Hay quien piensa que algunos homosexuales nacen así. Esto no está científicamente comprobado. Además si así fuera (como los que dicen ver diferencias en el cromosoma 19 de personas homosexuales), sería un pecado transmitido por vía genética (ver el post anterior de Dic 2012), nunca Dios crea personas homosexuales.

Los que hablan de que es el ambiente lo que origina personas homosexuales, también en mi opinión se equivocan. Me tachen de lo que me tachen, afirmo que una persona se vuelve homosexual al ser constantemente instigada (a veces desde la más temprana edad) por demonios, a tomar decisiones en ese sentido, proponiéndole imágenes, afectos desordenados, sentimientos, sueños de felicidad,..., contra los que la persona no sabe luchar, principalmente por el desconocimiento de las Escrituras y por el abandono o inexistencia de una vida cristiana. Al final la persona cree que es homosexual y actúa en consecuencia.

Además de esto, la homosexualidad debilita la sociedad occidental de raíces judeocristianas, lo que explica que en sociedades islámicas, el enemigo instiga precisamente a lo contrario, a matar a los homosexuales públicamente, para que sirva de escarmiento y así personas que se sienten homosexuales, se casan y tienen hijos, por pánico al castigo, lo que empuja la expansión demográfica islámica que está colonizando occidente.

Esto se completa con los casamientos de niñas en cuanto tienen la regla, porque no hay que perder tiempo en dar hijos islámicos que colonicen a los infieles (lo que origina noticias como la de ayer, en que se contaba la muerte de una niña de 8 años en la noche de bodas, con un animal de 40, desangrada por el acto salvaje de este ser envilecido por toda clase de pasiones. No es de ninguna manera un hecho aislado). Siguen el modelo de su hombre perfecto, Mahoma, el cual se casó múltiples veces, hasta con una niña de 9 años. Igualito que Jesús.

La Biblia condena la homosexualidad en :

Lv 18, 22 ; Lv, 20, 13 ; Dt 23 ; 1Ry 14, 24; Sb 14, 26; 1Tim 1, 10; Rom 1, 26-32; 1Cor 6, 9-10,...


Pero la mayoría de los humanos no han pasado del momento en que Adán y Eva muerden la manzana, porque quieren ser dioses y decidir sobre lo que está bien y lo que está mal, independientemente de lo que Dios quiera. Esta es toda su vida espiritual: creer al Diablo y hacer lo que éste les sugiere.

La codicia de muchos instigada por Satanás les hace moverse para promover la homosexualidad, porque estas personas disponen de más dinero para viajar, arreglarse, usar ropa cara, tratamientos, cosméticos, gimnasios, la noche,.... El mundo homosexual consume mucho y eso hay que aprovecharlo.

Los políticos hambrientos de poder ven en el mundo homosexual un importante caladero de votos, por lo tanto, favorecen leyes impulsadas por el lobby gay.

Y todo está enmarcado en el plan de Satanás para luchar contra los "Hijos de la Mujer" del Apocalipsis. Pero Dios es paciente; aunque deje abandonados a todos estos a los deseos de su corazón pervertido, tiene Sus planes, que no serán torcidos, aunque pasen generaciones.

Dios expulsó del Paraíso a Adán y a Eva, por su bien, como única manera de realizar la historia de la salvación y restituir su naturaleza a la diseñada por Él, deshaciendo la profundísima herida que ellos habían permitido a Satanás inflingirles.
Pero el ser humano recuerda el Paraíso, lo anhela, lo busca. Dios les echó a ellos dos de allí, pero no echó a la Serpiente, por lo que cada vez que el ser humano busca el Paraíso, se encuentra con la Serpiente.

La única manera de no hacerle el juego a la Serpiente, es buscar la voluntad de Dios y los caminos que él ha dejado en este laberinto que es la existencia del ser humano.

Un saludo.

P.D.: Que se deje el mundo gay de usar el arcoiris, pues el primero que lo usó fue Dios tras el diluvio, como señal de pacto de que jamás habría otro diluvio y ellos lo están usurpando (aunque eso es típico de Satanás el imitar las cosas de Dios para reírse de ellas).


domingo, 8 de septiembre de 2013

Matrimonio Cristiano


Hola a todos:

Acabo de volver de Medugorje (viaje que recomiendo), donde la Virgen nos ha pedido que seamos apóstoles humildes suyos, que leamos la Biblia y que oremos y seamos obedientes a nuestros pastores.

Así que voy a poner hoy una cosa que llevo en la cabeza desde hace algún tiempo, por si a alguien le puede ayudar.

He llegado a la conclusión de que el matrimonio cristiano es una decisión libre entre un hombre y una mujer ,en presencia del Señor, para santificarse el uno al otro y dar hijos santos a Dios en el seno de Su Iglesia, pase lo que pase y cueste lo que cueste, por el amor humano que ha surgido entre ellos y la llamada recibida de Dios a tal vocación (o misión).

Si los cónyuges van con esta idea, el Señor lo bendice y le da la fuerza del Espíritu Santo para superar todas las dificultades, por grandes que sean.

Pero  si los cónyuges no van con esta idea, Jesús no lo bendice, siendo un matrimonio nulo, es decir, que allí no ha pasado nada. No ha habido sacramento y aunque para la comunidad, están casados, para Dios no.

Creo que es importante resaltar una serie de cosas que los futuros esposos deben saber antes de ir al altar, para evitar vivir una mentira que acarreará graves consecuencias para ellos y para los hijos que eventualmente nazcan (la mayoría de los que se casan van con la idea de que el matrimonio es un contrato, que dura lo que duren los sentimientos amorosos):

- Toda persona humana decepciona:

Si te crees que la persona con la que te cases no te va a decepcionar nunca, te equivocas.
Muy probablemente la otra persona alguna vez será egoísta, no estará cuando le necesites, te pondrá los cuernos, preferirá a los amigos, te insultará o gritará o atizará; no se llevará bien con tu familia, le gustarán cosas que te horrorizan, querrá el mando de la tele,.................. . . . . ..............


- Vendrán hechos imprevistos:

Tu pareja enfermará,  morirá algún día, habrá problemas con los hijos (o por no tenerlos), o económicos, o de cualquier otro tipo.

- El amor humano se acaba y durante el poco tiempo que dura, hay que forjar un compromiso serio y duradero con los ojos puestos en el compromiso de darle hijos santos a Dios, lo que incluye darles educación y ejemplo constante durante toda la vida (y pedir constantemente al Espíritu Santo la gracia,para que todo funcione).

El sexo no lo arregla todo, aunque como dice un buen amigo mío: "es el "cirineo" que ayuda a llevar la cruz del matrimonio".

Como el matrimonio cristiano válido es muy querido por Dios, el demonio tratará de romperlo de mil maneras. Instigará celos, sospechas, mentiras y todo tipo de egoísmos, para lograr romper "lo que Dios ha unido". No creer en el bicho o no estar en guardia contra él llevando una vida cristiana, es dejar un resquicio por el que se colará trayendo la infelicidad profunda, donde debería haber paz, amor y alegría, como en la Sagrada Familia de Nazareth.

Nadie es adecuado para aconsejar y yo menos que otras personas, sólo expreso mi opinión por si a alguien le puede servir. Un saludo.